Marzo es el mes de la llegada de la primavera

La llegada del mes de marzo trae oficialmente la primavera hasta nuestras latitudes, al menos la primavera meteorológica, porque la astronómica tendrá que esperar hasta el próximo 20 de marzo.
El paulatino aumento de las temperaturas despierta del letargo invernal a buena parte de la flora y fauna de nuestro entorno. A poco observador que se sea, notaremos movimiento entre los animales, las aves por ejemplo se encuentran mucho más activas y proclamando a los cuatro vientos sus nuevos territorios de cría. También algunos mamíferos nos muestran a sus nuevos retoños, como es el caso de estos conejos de monte, que utilizan la A-23 a la altura de Villanueva de Gállego para sacar adelante a sus gazapos. Pero lo que no pasa desapercibido para nadie es la explosión floral que tiene lugar en primavera.
La floración del almendro lleva un poco de retraso, especialmente en aquellas zonas donde antes florece, pero no es menos cierto que las variedades que se cultivan en la actualidad son más tardanas con el fin de proteger a la futura cosecha de las heladas tardías.
Y además del color, el olor lo impregna todo, unas fragancias que despiertan nuestro sentido olfativo. Y también parece que despierten a los insectos, especialmente a las abejas, esenciales en el trabajo de polinización de las flores.
Para desgracia nuestra, la primavera climática en Aragón no se extiende mucho en el calendario, pasando rápidamente del frío al calor, pero tenemos por delante varias semanas de suaves temperaturas y un intenso cromatismo que debemos aprovechar al aire libre.